martes, 9 de octubre de 2007

Gestión de proyectos

Escuchando las experiencias de la Universidad que nos presentó esta mañana, la doctora Adriana Garcia, me han quedado muchas inquietudes. Sería extraño pensar en que yo que llevo “lidiando” con la gestión de proyectos durante varios años, aún tenga tanto por reflexionar sobre el tema.

La administración/gestión de proyectos, considero que es una ardua tarea que refleja en su magnitud la otra difícil tarea de la acción de planear. Si, planear, algo que parece tan sencillo, pero que determina el éxito de las ejecuciones y el resultado de los resultados esperados.

Especialmente, ahora que pienso en los proyectos que pretenden innovar en la forma en que las TIC deben incursionar y aportar al logro de aprendizajes significativos, caigo en cuenta de la gran cadena de variables que afectan una a otra y entre todas a un proyecto, donde el producto final es un “mejor ser humano”. Qué difícil tarea!!

Tratando de establecer algunos ítems claves, que me aporten a formular y gestionar proyectos de educación y tecnología, empiezo a pensar en estas claves del éxito…

• La claridad sobre las necesidades educativas, de formación, de aprendizaje…es lo que determina el acierto del proyecto.
• La cultura y las personas a quienes está dirigido el proyecto son las que determinan la metodología de aproximación al cambio, a la innovación.
• Por buenos que sean los resultados iniciales, no dejes de observar… asegúrate de la sostenibilidad de los resultados en el tiempo.
• Verifica que los resultados e impactos esperados están presentes, no dejes de valorar todo aquello que pueda aportar a retroalimentar el proceso de cambio.

Desarrollo Tecnológico y ...

Podría pensarse que recorrer el camino de la sociedad industrial a la sociedad de la información y del conocimiento, implica identificar los aportes de la tecnología a la administración y gestión de la información, del conocimiento y el desarrollo productivo de los pueblos. Sin embargo, participar de la globalidad requiere “montarse” en el tren tecnológico y entenderlo como medio para potenciar el desarrollo de un país.

Una primera preocupación que me surge cuando se trata el tema tecnológico, su cobertura, aplicabilidad e impacto sobre la vida de las personas, se centra en cómo valorar este impacto de la tecnología a nivel no solo de su cobertura, cantidad y calidad de equipamiento, sino de cómo y porqué, es que su presencia en la vida de los pueblos puede verse afectada, desde una perspectiva de desarrollo social.

Una segunda preocupación, es como se deben gestionar los procesos culturales, donde la tecnología irrumpe, podría decirse de manera inesperada para muchos, y donde se conjugan variables tan complejas.
Siguiendo el lineamiento presentado por la OCDE1. en su informe sobre “El impacto de las nuevas tecnologías y de la sociedad de la información en el proceso de desarrollo de las políticas y en la calidad Democrática”, las nuevas tecnologías se incorporan en todos los ámbitos del desarrollo humano y de las naciones, siendo objeto de estudio en el contexto de las nuevas sociedades, producto de este mismo fenómeno tecnológico, cosa que con las tecnologías tradicionales no ocurrió. Los avances tecnológicos como Internet, la comunicación inalámbrica, los computadores personales y los conceptos de colaboración de la Web 2.0, están obligando a las sociedades a cambiar sus patrones de interacción, no solo entre la sociedad civil, sino en su relación con el gobierno, la administración pública, el sector educativo, productivo y hasta el mercado laboral. Esto sin embargo, no es tan gratuito como pareciera ser, ya que el gran desafío que imponen estas tecnologías y su rápido desarrollo, se relaciona de manera directa con su influencia en la calidad de vida y bienestar de las comunidades, para lo cual no es suficiente ofrecer oportunidades sociales, facilidades económicas y libertades políticas.

1. Organisation for Economic Co-operation and Development
UNESCO (2002). Grado de desarrollo de la sociedad de la información, declaración política y plan de acción que integre Sur América, Centro América y el Caribe. UNESCO. 80 p.